Argentina acordó la venta de gas de Vaca Muerta a Brasil
Se trata de la firma de un Memorando de Entendimiento para desarrollar infraestructura e interconexión para la exportación del vital combustible.
El Ministro de Minas y Energía de Brasil, Alexandre Silveira, anunció un Memorando de Entendimiento con la Argentina para desarrollar infraestructura e interconexión para las exportaciones de gas natural. El “megaacuerdo”, tal como lo consideran en Brasil, crea un grupo de trabajo bilateral para exportar gas de Vaca Muerta al país vecino.
El Memorando de Entendimiento incluye la venta de 30 millones de metros cúbicos al día al mercado brasileño a partir de 2030. En el inicio del encuentro bilateral, el gobierno de Milei finalmente confirmó que adherirá a la Alianza Mundial contra el Hambre impulsada por Lula da Silva.
El documento prevé la compra en el corto plazo, por parte de Brasil, de 2 millones de metros cúbicos diarios de gas argentino. Se espera que este volumen aumente hasta los 10 millones de m³/día en un horizonte de tres años y alcance los 30 millones de m³/día en 2030.
Se trata del mismo volumen que Brasil importaba diariamente desde Bolivia a través del gasoducto (Gasbol) que fue construido en los años 1990 y conecta los dos países. Sin embargo, con las reservas bolivianas en disminución, ahora ese volumen llegará desde Neuquén.
En el corto plazo se usará el gasoducto Bolivia-Argentina, que originalmente estaba destinado a importar gas de Bolivia. Se harán adaptaciones para una “reversión” del flujo, que irá de Argentina a Bolivia y después se transportará el gas a Brasil a través de Gasbol -que tiene una capacidad de 30 millones de m³/día-, que cruzará Mato Grosso do Sul y llegará a São Paulo.
En tanto, también se evaluarán conexiones entre la Argentina-Rio Grande do Sul, vía Uruguaiana; la Argentina-Paraguay-Mato Grosso do Sul; y la Argentina-Uruguay-Rio Grande do Sul.
El escrito también establece que se discutirá el precio del gas de Vaca Muerta, de acuerdo a la evolución de las negociaciones, que se gestaron principalmente en Brasilia entre la embajada argentina y los funcionarios de Luiz Inácio Lula da Silva.